Santa Gema Galgani (1878-1903) tuvo muchas aparicioens de Jesús. Él dijo: Jesús decía abrazándola:
“Hija, yo me doy todo a ti, ¿Y tú no querrás ser toda mía? Yo estaré, hija, siempre contigo. Yo soy tu Padre, y tu Madre será la Virgen Dolorosa.”
“Jamás faltará la paternal asistencia a quien se ponga en mis Manos. Nada pues te faltará a ti, aun cuando te haya privado de todo consuelo y apoyo en la Tierra. Acércate. Tu eres hija mía. ¿No eres feliz siendo hija de Jesús y de María?”
“Hija, mira estas Llagas. Las habías tú abierto con tus pecados. Pero ahora, alégrate, que todas las has cerrado con tu dolor. No me ofendas más. Ámame, como yo siempre te he amado. Ámame. Ámame. Ámame.”
“Estoy loco para unirme a ti. Corre y ven todas las mañanas. Pero mira bien que yo soy un Padre y un Esposo celoso. ¿Me serás tú una hija y esposa fiel?”
Jesús mostró sus Cinco Ilagas abiertas y dijo: “Mira, hija, y aprende cómo se ama. Mira esta Cruz, estas espinas, estos clavos, esta lividez, estos desgarrones, estas Llagas y esta Sangre. Todo es obra de amor y de amor infinito. ¿Ves hasta qué 'extremo te he amado? ¿Me quieres amar de verdad? Aprende antes a sufrir. El sufrir enseña a amar.”
“Hija, a través de tu vida te daré ocasiones de mayor mérito, redohlando en ti el deseo de ir al Cielo, y soportando al mismo tiempo con paciencia la vida.”