jueves, 26 de septiembre de 2013

La Novena solicitada por Nuestra Señora

El noviembre de 2002, Nuestra Señora ensenó esta Novena en Divinópolis, MG, Brasil, para Leandro Ferreira, 17 años em la ocasión, Karoline Dias, 18 y Ana Cristina, 17. Las apariciones sucedieron en las iglesias y capillas, se iniciaron el 1 de septiembre 2001 y finalizaron el 1 de septiembre 2008. Otros jóvenes también fueron testigos. Estas apariciones son analizadas por la Iglesia Católica. La Virgen Maria dijo: 

"Yo soy la Madre de la Humanidad. Quiero que todos oren esta Novena. Daré muchas gracias a quién la orar. Ustedes pueden orar solo o en grupo y comenzar en cualquier mes y cualquier día. Esta Novena es un mensaje especial para el mundo todo. No tengan pereza para orar. El mundo necesita mucho de las oraciones de todos ustedes." 

Primer día: "Hoy oren por la conversión de los pecadores, pela conversión pela conversión, de sus vidas, para que sus corazones se abran para Dios. Él los ama mucho. Pero este mundo retribuye al Señor con los pecados. Oren para reparar estos pecados. El Corazón del Señor está muy triste por eso. Ustedes no saben cuánto. Yo sufrí con Él cerca de la Cruz. Toda el dolor, las lágrimas y la Sangre que Él derramó fue por ustedes. Hijos míos, comprendan cuán grande es la escala del amor de Dios por ustedes y cuánto Él es ofendido por los pecadores. Oren para cambiar a los pecadores. Ustedes obtendrán todas las cosas con la oración, se también buscaren la conversión. Oren al Señor y pidan por la conversión de los demás. Que el mundo entero se convierta para ser salvo." 

"Cada día de esta Novena, después de leer el mensaje, oren 1 Padre Nuestro, 10 Ave Marías y Gloria. Luego, oren al Señor con sus palabras por la intención. Amen sus hermanos y oren: ¡Nuestra Señora, Madre de la Humanidad, ruega por nosotros!" 

Segundo día: "Hoy oren, oren mucho por la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana. Oren por el Papa, los cardenales, los obispos, los sacerdotes, los religiosos e las religiosas. ¿Oren por todos ellos y por cada uno de ellos! Ellos necesitan mucho de sus oraciones para no caer en el pecado, ser más santos y donar sus vidas a Jesús, porque son sus siervos. Oren todos los días por esta intención y Dios los santificará. Y elles serán capaces de ayudar ustedes, pues esta es la razón de su venida al mundo.” 

 Tercer día: "Hoy oren por sus vida, por ustedes mismos, por sus hermanos, por todo el mundo y por cada uno de sus habitantes, especialmente por los niños, adolescentes y jóvenes. ¡Oren por el mundo, hijitos! El mundo hace tantos pecados y muchas personas pueden perderse para siempre en el infierno... No, yo no quiero eso. Oren por sus familias y por las otras familias que ustedes no conocen. Las famílias son muchas y están diseminadas por todo el mundo. Ustedes sufren con el pecado en sus casas. Ustedes sufren. Oren para vencer el pecado y no hacerlo más y tendrán paz. Ustedes serán felices con sus familias y vecinos. ¡Serán felices! Oren por sus amigos, por su barrio, por la gente de su ciudad, para que ellos se salven y lleguen al Señor. Yo estoy con ustedes y los amo. Pero quiero que ustedes hagan algo para mí y para Jesús hoy." 

Cuarto día: "Hoy, oren para aquellos que están en las garras del pecado y del vicio, por aquellos que están viviendo en pecado y no consiguen deshacerse de el, por aquellos que están en el mal y lo desean. Ellos pueden perderse si ustedes no oraren por ellos antes y si ellos no se convierten. Conviertanse ustedes todos, sin excepción, y oren por los demás, por aquellos que son malvados, por aquellos que no tienen a Dios en sus corazones, por aquellos que no creen en Dios: los no creyentes. Oren por los no creyentes y ateos de todo el mundo, para que se salven y lleguen al camino de la salvación. Oren, hijitos, oren mucho por estos sus hermanos. Estoy muy triste por ellos, pero su oración me puede dar alegría y consuelo a Jesús. Si supiesen cuánto Él los ama... Él ama a todos, sin distinción ni exclusión. Para todos, sean santos o pecadores, Jesús ama de misma manera.” 

Quinto día: "Hoy, mis queridos hijos, oren por las almas del Purgatorio. Oren por ellos. Ellos están sufriendo mucho y están se purificando de sus pecados. Oren por ellos! Él Purgatorio es muy duro, muy triste y doloroso. Y ustedes no oran por aquellos están ahí. Oren para que ellos puedan ir al Cielo con mayor rapidez. Den limosna, hagan ayuno y oren por estas almas. Vayan a la Misa y oren por ellos y por el mundo. Oren también por los que se encuentran en los últimos momentos de la vida, los agonizantes. Ellos sufren y son tentados por Satanás en su agonía. Oren para que las fuerzas del mal no prevalecezcan. Oren también por los agonizantes pecadores, para que se arrepientan de sus pecados y lleguen a la salvación.” 

Sexto día: "Hoy oren por aquellos que sufren. Ustedes lloran y yo veo eso, pero Dios les consolará. Oren por los enfermos que están sufriendo en casa, en hospitales, en su lecho de muerte y en las enfermedades incurables. Oren por los niños enfermos, los enfermos tratados en las cirugías, por sus familiares... Oren por los enfermos en el alma con crisis y problemas psicológicos, por aquellos que quieren suicidarse y las personas deprimidas. Oren para Jesús darles la alegría de vivir. Oren por los padres, las madres, los niños, los huérfanos, los jóvenes, los rebeldes, los ancianos... Oren por los desesperados, los preocupados, los ofendidos, los agraviados... Oren por aquellos que viven em la miséria y la pobreza. Oren por aquellos que sufren de hambre e están sin casa. Oren por los desempleados, los abandonados, los marginados, los presos y tantos otros que sufren... Oren para que Jesús pueda ayudar estas persons. ¿Y que ustedes también las ayuden! Hagan obras de caridad, hijitos. Ayuden a los pobres y enfermos. Así serán recompensado. Oren por ellos y los ayuden. Continúen haciendo esta Novena, hijitos queridos, porque Jesús está muy feliz por causa de ella y los bendice.” 

Séptimo día: "Hoy, hijitos, oren para que puedan practicar los mis mensajes, las mis peticiones, las peticiones de Jesús en mis palabras. Sí, Él dice eso. Él me manda y yo hablo lo que Él pide. Oren! Oren el Rosario. Vayan a la Missa y reciban la Comunión. Hagan ayuno. Oren con el corazón. Visiten y adoren al Santísimo Sacramento. Ofrezcan sacrifícios y penitencias para consolar a Jesús de sus pecados. Hagan esto. Eso es lo que Él les pide. Estos son mis peticiones y d’Él también. Él quiere les dar alegría, pero sus corazones viven en pecado y con el pecado. ¡Conviértanse, hijos míos, no quieran al mal! No elijan Satanás y el pecado. Oren también para protegerse contra Satanás, contra las garras del dragón y yo les protegeré. Yo ya les protejo. Pero Satanás sigue circulando a su alrededor y los tienta. ¿Él quiere les destruir! Ustedes no saben eso. Oren a San Miguel Arcángel y todos los Ángeles y los Santos del Cielo para que ellos les protejan contra las garras del diablo, contra la tentación, contra el pecado y el mal, el mal que nunca viene de Dios, sino del diablo. Dios es bueno y la bondad viene de Él. Hijitos, sean buenos y practiquen mis mensajes." 

Octavo día: "Hoy, mis queridos hijos, oren para consolar al Sagrado Corazón de Jesús. Él está muy triste por causa del mundo, por causa del pecado en sus vidas y sus malas acciones... Oren para consolarlo. Cada pecado es como una espina en su corona. Esta corona fue coloca en Él por ustedes y por el mundo. ¡No pongan una corona hecha de pecados sobre Jesús, hijitos! Pongan una corona hecha de gloria y amor, hecha de las flores que son sus buenas obras y amor por Él. Oren y consuelen Jesús. Consuelen Él con una vida llena de amor y santidad. Mis hijos, oren también para consolar a mi Inmaculado Corazón. Soy continuamente ofendida por los pecadores con su falta de oración y amor. Ellos no tienen nada en sí mismas, sólo el pecado. Y estoy muy triste por eso porque yo soy la su Madre, la Madre de ellos y de ustedes. Oren por ellos y consuelen a mi Inmaculado Corazón y al Sagrado Corazón de mi Hijo Jesús. Alegren Jesus con sus vidas y con su oración, que debe ser continua." 

Noveno día: "Hoy, oren por la paz, por la paz en sus familias, por la paz en el mundo, pero especialmente por la paz en ustedes mismos y en sus corazones. Oren, hijitos, oren para que la paz pueda ser llena en sus vidas y en todas partes. Dios es Santo y la paz es un don d’Él, solo d’Él y sólo Él puede les dar. Ustedes obtendrán la paz con la santidad en sus vidas. Pero no con el pecado. Ustedes son pecadores, hijitos, pero pueden vencer y evitar el pecado con la ayuda de Jesús. Oren para tener la fuerza y el coraje para vencer cada tentación y tribulación, las penas y dificultades, las tristezas y angustias de la vida. Ustedes vencerán todo eso con la oración en sus vidas. Oren, hijitos, oren mucho. La paz está en Jesús. Ustedes conseguirán la paz si estuvieren con Él. Permanezcan cerca d’Él, hijitos, y oren, oren, ¡oren por la paz!" 

"Gracias, mis queridos y amados hijos, por haber orado esta Novena. ¡Estoy muy feliz! Quiero que ustedes hagan esta Novena muchas veces en sus vidas, siempre que quisieren y pudieren. Oren siempre a mi y a Jesús y pidan nos por estas intenciones. Esto será muy importante para ustedes. Gracias, muchas gracias."